La directora de la edición americana de la revista Vogue y una de las mujeres más poderosas en el mundo de la moda, Anna Wintour, será la encargada de devolverle glamour a los premios Tony que se celebrarán el próximo 7 de junio en el Radio City Music Hall de Nueva York. El American Theater Wing, que da estos premios a la excelencia en el teatro desde 1947, y el diseñador de vestuario William Ivey Long le han pedido a Wintour ayuda para convertir la alfombra roja que pisan las estrellas de Broadway en un acontecimiento mediático como son las de los Oscar o los Globos de Oro. “Anna es una asesora top secret y no va a ser remunerada. Va a arreglar la alfombra, hacerla más especial, algo que estos premios nunca ha tenido”
El American Theatre Wing es probable que haya decidido dar este paso después de leer la opinión de la gurú de la moda sobre el evento. En una charla que dio el verano pasado sobre cómo triunfar en la moda a los alumnos de la escuela londinense de Diseño Central Saint Martins, Wintour dijo que las alfombras rojas en EE UU se habían convertido en un evento “demasiado relacionado con los negocios”. Y si bien recomendaba a los alumnos, futuros diseñadores, aprender tanto de negocios como de patrones lamentaba que los paseíllos previos a los premios estuvieran tan comercializados. “Es un hecho que pagan a los famosos por todo lo que llevan puesto, y para mí eso se revela como algo muy prefabricado y nada individual”, les dijo justo antes de arremeter contra los premios de Broadway y echar la culpa del “desastre” a los equipos de estilistas y los propios diseñadores, no a los famosos.
“Acabo de estar recientemente en los premios Tony en Nueva York, y, dios, necesitan vuestra ayuda. Dejadme deciros: fue un desastre… Los famosos tienen todos estos equipos diciéndoles qué hacer, qué llevar puesto, cómo peinarse, cómo maquillarse. Y ellos tienen tanto miedo a ser criticados, pero en realidad, ¿qué hay de malo en ir diferente? ¿Cuántas colas de sirena, vestidos sin tirantes, podemos ver?”, dijo Wintour en Londres, pidiendo no sólo más glamour, sino más audacia.
No se sabe la labor concreta que tendrá la directora de Vogue en los premios, si como asesora aconsejará a las estrellas protagonistas o sólo a organizadores y presentadores. Aunque teniendo en cuenta que los teatros de Broadway cada vez cuentan con más estrellas de Hollywood acostumbradas a pisar las alfombras más glamurosas, se puede esperar que este año los Tony puedan competir con los Oscar con o sin ayuda de Anna Wintour. En esta edición, es probable que desfilen por su alfombra roja por sus papeles en Cabaret actrices como Michelle Williams, Emma Stone o Sienna Miller,favoritas claras de Wintour; también se espera a Bradley Cooper o Helen Mirren, y a una fashionista famosa como es la escritora y actriz Tavi Gevinson, alguien que siempre arriesga, como pide Wintour, y que debutó en el teatro esta temporada.