En las camisetas se puede ver a famosos como Cara Delevingne, Will Smith, Marilyn Monroe, Lenny Kravitz o Winzka W., entre otros, tapados con un pasamontañas o con un dedo encima de su labio y un bigote dibujado. La idea no es original de Eleven Paris. Salvador Dalí y Marcel Duchamp ya jugaron a colocar un mostacho a la Mona Lisa en la década de los cincuenta, solo que entonces las leyes que regulan el derecho de imagen no eran como las actuales.
Las camisetas de Eleven Paris de Rihanna y Beyoncé.
Los famosos acusan a Eleven Paris y a sus socios de “infringir deliberadamente la propiedad intelectual y los derechos de autor de una lista de famosos”, según reza la denuncia, que continúa asegurando que estas ventas han causado y están causando un daño irreparable a los demandantes, “quienes desean recuperar los beneficios que han perdido en ventas de sus propias marcas y colaboraciones con otros fabricantes”.
Aunque parece que no a todos les disgusta la idea. Otros rostros conocidos como Cristiano Ronaldo, Joe Jonas, Steven Tyler o LeAnn Rimes han lucido abiertamente los diseños de la empresa de moda francesa, que fue creada en 2003 por dos amigos, Oriel Bensimon y Dan Cohen, como templo de la moda rock. En la actualidad tienen 50 tiendas, sobre todo en Francia, pero además están en Dubái, Beirut o Seúl. La empresa también vende otras prendas que hacen referencia a personajes del mundo del cine, de la música o de la moda con frases como “Kate (Moss) is my religion”, “Iggy (Pop) is my grand pa” o “Diva like Mariah (Carey)”.